Entre el lunes y ayer, Gran Bretaña inició maniobras militares en territorio argentino ilegítimamente ocupado, los que incluyen el lanzamiento de misiles Rapier desde las Islas Malvinas. Así lo denunció la Cancillería Argentina a traves de un documento público.
"Estas maniobras constituyen una injustificada demostración de fuerza y nuevamente hacen caso omiso de los llamamientos de las numerosas resoluciones de las Naciones Unidas y de otros organismos internacionales -dice el texto-, que instan tanto a la Argentina como al Reino Unido a reanudar las negociaciones, a fin de encontrar una solución pacífica y definitiva a la disputa de soberanía que involucra a ambos países en la Cuestión de las Islas Malvinas".
Nota de protesta
"El Gobierno argentino ha denunciado la situación ante el Secretario General de las Naciones Unidas y ante la Organización Marítima Internacional -agrega el documento-. El pasado 6 de abril, al tomar conocimiento de que este ejercicio iba a producirse, había enviado al Gobierno británico una contundente nota de protesta", se remarcó.
"En cumplimiento de sus responsabilidades y obligaciones en el Atlántico Sudoccidental en materia de seguridad de la navegación, y en el marco de la Organización Marítima Internacional (OMI) y de la Organización Hidrográfica Internacional, la Argentina, a través del Servicio de Hidrografía Naval, emitió el correspondiente aviso náutico con la debida salvaguarda de los derechos de soberanía argentinos, a efectos de que el tráfico marítimo en la zona de los ejercicios militares no sea puesto en peligro por los ilegítimos ejercicios militares británicos", detallaron.
"Estas maniobras militares demuestran una vez más que la ocupación ilegítima de Malvinas es la excusa para el establecimiento de una desproporcionada base militar. Actualmente cuenta con 1.200 efectivos en Monte Agradable y otros 300 civiles que prestan servicios realizando tareas de apoyo. Las Islas Malvinas representan uno de los territorios más militarizados del mundo, teniendo en consideración la cantidad de militares por habitante", se precisó.
Lineamientos políticos
"Las Fuerzas Británicas en las Islas del Atlántico Sur (BFSAI) resultan desproporcionadas si se tiene en cuenta la persistente voluntad de diálogo expresada por el Gobierno argentino y su deseo de resolver la disputa territorial por medios pacíficos. Al mismo tiempo, el despliegue militar británico en el Atlántico Sur resulta funcional a los lineamientos políticos de la reciente revisión integrada de seguridad, defensa y política exterior del Reino Unido destinada a mantener una presencia activa en los lugares de interés, considerados estratégicos", insistieron.
"Este despliegue militar en una zona de paz y desnuclearizada no afecta sólo a la Argentina sino también a los países de la región y de otras regiones, que han expresado su preocupación a través de múltiples pronunciamientos. En particular, la presencia militar, y el lanzamiento de misiles, contradice la resolución 41/11 de la Asamblea General (Zona de Paz y Cooperación en el Atlántico Sur) que, entre otras disposiciones, exhorta a los Estados de todas las demás regiones, en especial a los Estados militarmente importantes, a que respeten escrupulosamente la región del Atlántico Sur como zona de paz y cooperación, en particular mediante la reducción y eventual eliminación de su presencia militar en dicha región", señalaron.
"Frente a este nuevo acto de hostilidad, la República Argentina sigue reafirmando su permanente y constante voluntad de negociación entre las dos partes involucradas en la disputa de soberanía", concluyeron.